¿Viajar te hace feliz? Viajar comienza a hacerte feliz antes de hacerlo. El solo hecho de llevar tu mente a ese lugar que ansias conocer, y saber que en algún momento lo podrás ver y disfrutar con tus propios ojos, genera cambios positivos en tu cerebro.
En un estudio llevado a cabo por American Psychological Association con un grupo de universitarios, se comprobó que estas personas desde que comenzaron sus preparativos para el viaje, aumentaron su extroversión, complacencia, apertura a nuevas experiencias, y se redujo su neurosis.
Pero qué es la felicidad….
La felicidad según investigadores de la Universidad Estatal de San Francisco, se basa en generar recuerdos con base a experiencias y vivencias personales. Así que, si decides invertir en viajar, estarás invirtiendo en tu felicidad, pues crearás recuerdos de experiencias que durarán para siempre.
Aquí te damos 5 razones por la cuales viajar te hace feliz:
1. Reduce el estrés y te genera bienestar emocional. Un estudio realizado por investigadores de Arizona, en Estados Unidos, llegó a la conclusión que las personas que se toman vacaciones y viajan, son menos propensas a estar cansadas, estresadas y deprimidas. Así que salir de la rutina al viajar, ayuda a que mejores tu ánimo y tengas una mejor calidad de vida.
2. Mejora tu confianza y promueve tu desarrollo personal. Viajar te da una mayor estabilidad emocional y te da más confianza para atreverte a vivir nuevas experiencias. La doctora Julia Zimmermann y el doctor Franz Neyer, de la Universidad alemana de Friedrich-Schiller, hicieron un estudio del desarrollo de la personalidad con más de 3.000 estudiantes universitarios alemanes, que realizaron sus estudios en el extranjero durante al menos un semestre, comparándolo con un grupo que no viajo para hacer sus estudios. Esta investigación dio como resultado que los jóvenes que estudiaron en otro país eran más extrovertidos y más estables emocionalmente que los que optaron por no viajar.
El hecho de que tengas que afrontar situaciones inesperadas, retos que se te presenten en el camino, tener que aprender a comunicarte con personas que no hablan tú mismo idioma, ¡te sacará de tu zona de confort y esto ya es una gran ganancia!
3. Afrontas los problemas de manera más asertiva. Las barreras desaparecen cuando viajas. De un momento a otro te encuentras en un lugar diferente, con nuevos paisajes, con una comida que no sabe igual a la de tu lugar de origen, con culturas diferentes a las tuyas, lo que te hace abrir tu mente y entender al ser humano en toda su extensión de una mejor manera.
Cuando conoces nuevas realidades, aprendes a tomar distancia de tu propia vida y ver las cosas que te rodean y tus problemas en su real dimensión. ¡Aprendes a valorar lo que tienes!
El prestigioso médico canadiense Mel Borins escribió en su libro publicado en el año 2.000, “Go Away Just For The Health of It” ("Vete lejos solo por lo saludable que es"): "Irse lejos contribuye a alejarse de las partes estresantes de la vida. Puede ayudar a mejorar tus perspectivas, a brindar nuevos puntos de vista y permite desarrollar nuevas estrategias para afrontar los problemas".
4. Potencia la creatividad y la plasticidad de tu cerebro. Las nuevas situaciones que vivimos a la hora de viajar ayudan a estimular nuestro cerebro. Y al cerebro es clave estar entrenándolo permanentemente. “Hay tres elementos importantes para entrenar el cerebro: enfrentar nuestro cerebro a la novedad, la variedad y el desafío. Viajar cumple con los tres”, afirma José Manuel Moltó, miembro de la Junta Directiva de la sociedad Española de Neurología. Y agrega: “Viajar requiere, principalmente, aprender a memorizar todo lo extraño hasta que todo resulte normal y conocido. Esto es un desafío para tu cerebro y es un entrenamiento acelerado”.
Por eso, conoce nuevos lugares cada vez que puedas. ¡Tu cerebro te lo agradecerá!
5. Tu corazón se mantiene sano y contento. En Estados Unidos se llevó a cabo un estudio donde se determinó que viajar reduce el riesgo de padecer un infarto. La investigación arrojó que en los hombres que viajan con frecuencia, las probabilidades de sufrir un infarto al corazón son un 21% más baja.
Estas 5 razones y muchas más nos demuestran lo beneficioso de viajar y lo feliz que nos puede hacer. Todo lo que vives en un viaje, las personas que conoces, los lugares y paisajes con los que te encuentras, las anécdotas que te quedan, lo que aprendes y desaprendes, suman para alegrar el alma y el corazón.
Viajar te hace sentir pleno, lleno de energía, realizado, activo, feliz. ¡Viajar te hace sentir vivo!
¡Viaja! Te ayudará a salir de la rutina, experimentarás una disminución de ansiedad y depresión causados por el estrés de la vida diaria, te nutrirás de otras culturas y estilos de vida, vivirás experiencias nuevas que te sorprenderán y enriquecerán tu espíritu, y tu salud mental y física mejorarán notablemente.
Eso sí, hazlo con todas las precauciones de bioseguridad. La nueva realidad que estamos viviendo lo pide. ¡Cuídate tú, cuida a los otros y busca tu felicidad!
