Islandia está catalogado como el “país más joven del mundo” pues aún continúa en construcción, lo que garantiza un espectáculo natural inigualable.
Las tierras heladas pero también volcánicas de este país hacen que te encuentres cientos de contradicciones fascinantes donde elegir un solo lugar no será suficiente. El reto en Islandia está en cómo hacer tiempo para poder ver todo lo que esta diversa isla tiene para ofrecerte.
1. Visita dos continentes en el parque nacional de Thingvellir
Islandia está ubicada sobre dos placas tectónicas terrestres, en este lugar podrás apreciar las fracturas que ha producido esta separación que continúa avanzando 1 cm al año en ambas direcciones. ¡Aquí podrás estar al mismo tiempo entre Norteamérica y Euroasia!
Thingvellir tiene además, un gran valor histórico para los islandeses pues antiguamente este era el lugar donde se reunían los “Lords” de los 13 reinos a gobernar el país.
2. ¿Una playa negra?
¡Claro que sí! te hablamos de Reynisfjara, un inusual escenario con arena volcánica, enmarcado entre grandes acantilados y enormes columnas de basalto. Esta playa está catalogada como una de las 10 playas no tropicales más hermosas del mundo. Además, si se te hace familiar este lugar, es porque tal vez lo viste en la serie Game of Thrones, Reynisfjara, fue una de las locaciones en Islandia de esta famosa producción.
3. Relájate en las aguas termales de Myvatn
Aunque la Laguna Azul es el lugar con aguas termales más reconocido, la realidad es que hay otros manantiales en Islandia que quizás merecen más la pena y que tienen definitivamente un precio más asequible. En la ciudad de Myvatn vivirás una experiencia auténtica sumergiéndote en las aguas calientes y azules islandesas sin multitudes o costes excesivos.
Visitar Mývatn es una experiencia completamente surrealista gracias al agua geotérmica extraída de la tierra, donde no podrás ver a través del agua debido a sus altos niveles de minerales, pero podrás caminar cientos de metros pues la profundidad del agua se mantiene a niveles muy cómodos.
4. Sal a cazar auroras boreales
La experiencia de ver cómo el cielo nocturno se tiñe de los colores más surrealistas que podrías imaginar, mientras te rodea un paisaje nevado del Ártico es algo mágico que todo el mundo debería hacer, por lo menos, una vez en la vida.
Hay pocos lugares en el planeta mejores para contemplar este espectacular fenómeno que Islandia. En este lugar, como en el resto del hemisferio norte la época más propicia para ver auroras boreales es el otoño y el invierno, de septiembre hasta abril. Las causas son sencillas, simplemente las horas de luz son menores y ello hace que las auroras sean visibles durante más tiempo.
¡Bonus! 2 consejos para hacer tu viaje más cómodo:
1. Es importante que te marques objetivos de sitios por visitar, por ejemplo: glaciares, aguas termales, cascadas y crees una ruta de tours comenzando por el lugar más lejano.
2. Septiembre es uno de los mejores meses para visitar la Islandia ya que no es uno de los más fríos (5º de noche y 10º-14º por el día), pero tienes que ir preparado, por eso te recomendamos: ropa interior térmica, chaqueta Mission o chaqueta Thermo Reflect, guantes Thermo Tech Touch, gorro Pompón Furry y botas Winter Impermeables. Desde finales de agosto es posible ver la aurora boreal, así que ir bien abrigado es una prioridad.
